Los selladores dentales son un recubrimiento delgado de resina que se aplica a los surcos de las superficies de piezas dentales traseras, los molares y premolares...
Los selladores dentales son un recubrimiento delgado de resina que se aplica a los surcos de las superficies de piezas dentales traseras, los molares y premolares. Después de haber limpiado con cuidado la zona que debe ser sellada, el odontólogo lija el esmalte con una solución ácida para que la sustancia oclusiva se adhiera al diente. Luego aplican la resina líquida en el interior y por encima de las cavidades y fisuras. Cuando el líquido se endurece, se forma una barrera tan eficaz que las bacterias del interior de la cavidad o de la fisura dejan de producir ácido porque ya no tienen acceso al alimento. Alrededor del 90% del sellador persiste al cabo de 1 año, y el 60% sigue en su lugar después de 10 años. La necesidad de reparación o sustitución de los selladores se valora en exploraciones periódicas.